miércoles, 21 de abril de 2010

37 días

Sigue el récord... Me fui a la cama con el regusto dulce, pero no demasiado, de la derrota del Barcelona, y al rato, mientras sopesaba ver otro episodio de Nurse Jackie o continuar con un libro ligero pero delicioso de Amelie Nothomb, Aimar había descendido varios puestos de mi lista de prioridades accesorias. Es la primera vez en mi vida que no apoyo a un club español en competición internacional, y no me sabe bien, pero no es deseable que el Barcelona gane la Champions en el Santiago Bernabéu. No quiero ver a seres muy queridos destrozados por la previsible orgía de catalanismo culé en plena plaza de Cibeles, con Joan Laporta jugando a diva pornstar rociada de cava autóctono.

5 comentarios:

  1. ...Por no hablar de la profanación del Sagrado Césped de Chamartín. Venga, confiesa, merengón reprimido con escudo del Hércules en la escayola.

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  2. ¿Qué prefieres, pibe? ¿Que no lleguen al Bernabéu o que la pierdan en el Bernabéu?
    (Sé lo que prefiere la policía, según el Abc de hoy).

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  3. Difícil cuestión. Creo que prefiero no tentar la suerte. Aunque ambos puedan ser justificables, siempre será preferible un aborto a un infanticidio.

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  4. En estos casos siempre vuelvo a lo que Arcadi Espada dejó aquí puesto:

    http://blogs.elmundo.es/elmundo/2009/05/27/elmundopordentro/1243422844.html.

    Si el Bayern llega a la final, veréis cómo muchos alemanes irán públicamente con el otro. No es tan grave disentir.

    Los madridistas se sienten obligados a declarar barcelonismo (http://www.larazon.es/noticia/2430-el-bar-a-como-en-casa) Y lo de siempre: si la final fuera en el Nou Camp y el Madrid estuviera donde el Barcelona hoy, ¿saldría Laporta diciendo que...? Ni siquiera Cruyff.

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  5. Quizá es el deseo de mostrar a otros lo que debería y alguna vez pudo ser España.

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